Blogia
De todo un poco, variedad ante todo

Mi coche

Cuando yo era un niño hiendo de camino ala escuela, recuerdo que cada día veía a un  hombre mayor que siempre llevaba un gran puro que olía muy mal que se bajaba de un coche rojo muy grande y bonito.
 
Cada día veía al mismo hombre con su coche tan guapo, con el paso de los años crecí y deje de ir a la escuela, pero ya no veía aquel hombre ni su coche, Ya habían otros coches mas modernos y distintos, pero a mi me gustaba aquel SEAT 124 color rojo rally, pero no se veían por la calle.
Un día pasando por un pueblecito de casualidad vi, aquel mismo coche con un letrero que decía “se vende” era el mismo, pregunte el precio me pareció excesivo, además el coche estaba deteriorado y en muy mal estado.

Seis años después volví a ver el coche en venta y en el mismo lugar, no se había movido de allí en seis años. Al final me decidí cómpralo, y axial lo hice.
Una vez en mi casa aquel coche estaba totalmente amarillento y quemado del humo de los puros,  del paso de  los años se abía podrido por varios sitios y tenia grandes agujeros en las puertas me di cuenta en aquel momento que era una autentica chatarra y que no servia para nada. Pero yo de niño recordaba un coche diferente a los demás.
                 

Un buen día decidí a reconstruirlo con mi hijo para poder enseñárselo tal y como yo lo recordaba, yo todavía me acuerdo de aquel hombre con su precioso coche rojo flamante. A día de hoy tengo ese mismo coche totalmente restaurado tal cual yo me acuerdo como cuando yo era niño. Hoy en día hay muchos coches modernos  que no tienen nada que ver con aquel coche, son muy seguros y tienen grandes prestaciones. Mi SEAT 124 apenas frena, los mandos son de maria castaña los asientos de muelles, etc... Pero cuando era niño me encantaba aquel coche ahora sigue siendo lo que era, un coche rojo flamante y bonito.

Esto no es una historia ficticia, es real.

 

0 comentarios